Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de enero 27, 2014

Vivir en una ranchera

¿Os habéis fijado en las letras de las rancheras? Ahí está la justicia divina y, más importante, la humana. La que podemos saborear sin esperar a ese paraíso del que nadie ha venido a darnos cumplida cuenta. Si pudiéramos vivir en una ranchera no tendríamos que preocuparnos de las traiciones, de las desgracias, de los males de amores, de los despechos, de los desprecios, de la indiferencia, del dolor de corazón. Los malos encontrarían su penitencia. Los buenos, su recompensa. Los amados, su gloria. Los rechazados, su venganza. La paciencia infinita  llevaría siempre a buen puerto. Lo mejor estaría siempre por suceder. ¡Qué fácil sería vivir en una ranchera! " Por eso aún estoy en el lugar de siempre en la misma ciudad y con la misma gente para que tú al volver no encuentres nada extraño y sea como ayer y nunca más dejarnos." " Y te voy a enseñar a querer porque tú no has querido. ¡Ya verás lo que vas a aprender cuando vivas conmigo!"